jueves, 27 de enero de 2022
Sombras de luz
jueves, 7 de enero de 2021
suspiros de miedo
domingo, 14 de abril de 2019
Entre dos mundos
Cuando vives en dos universos la gente cree que es genial, dos hogares, dos vidas, el doble de gente y de mundo por recorrer.
Lo que nadie ve es que al final no vives en dos mundos. Vives en el puente que los une. Ves ambos de lejos, siempre añorando el otro. Siempre extraño en el aquí. Siempre pensando en el allí.
Intentas, por tu salud mental, creer que tu vida es uno, pero no es cierto te mientes a ti mismo. Y tampoco lo puede ser el otro.
Intentas convencerte, el puente no esta tan mal. De cuando en cuando coincides con otros tan perdidos como tu. Otras ves a los que cruzan y los envidias. Sus caras de pena y de emoción. Una vida que se acaba y otra que empieza. La tuya nunca acaba, nunca empieza. Este es tu lugar. Una especie de purgatorio. Condenado a echar de menos toda la eternidad. A que tu corazón no este completo jamas.
Pero sigues sin aceptarlo, dudando ¿Que es real y que vida es solo fantasía? Cara o cruz. No lo has entendido aun ¿verdad? Siempre fuiste dura de mollera. Abre los ojos y entiendelo de una vez. Da igual cara que cruz, las dos pertenecen a la misma moneda ¿lo entiendes ya?
Bueno no te angusties, la eternidad es tiempo suficiente, como para que incluso tu, entiendas que todo es de verdad y ya nada sera nunca mas real. Que todo es una ilusion y que no hay sitio para la fantasia.
Ah lo has visto! Por fin... por fin lo has entendido, supongo. Es cierto, vives entre dos mundos pero solo hay una luz. Siguela. Sabes que merece la pena.
Te alumbrara siempre alla donde estes, y te prometo que es mas real que nada que hayas visto hasta ahora. Aunque aun no sepas desde donde alumbra no la pierdas de vista, tu vida no seria tan bonita sin ella.
Sonríe. Tienes un puente precioso. Y dos mundos que cuidar. Tengas el doble o la mitad tienes algo por lo que luchar. Sonríe
domingo, 13 de mayo de 2018
Conversaciones
-Si lo he hecho.
-Pero has cambiado.
-Si, eso también es cierto. Pero veo que tu también. No me mires así ya te he he explicado que tu no eres un ser atemporal. Eres un personaje de mi imaginación pero no eres inmune al tiempo o a las circunstancias, ni las mías ni por supuesto las suyas que no dejan de ser las tuyas.
Te intentaré explicar. Ambos hemos crecido, por un lado yo he crecido y al ser tu tan solo un personaje de mi mente eso te obliga a crecer conmigo. No podrías no hacerlo. No podria seguir imaginandote como lo hacia antes. Pues ya no pienso igual.
Al tiempo has crecido con el. Porque para mí no eres sólo un producto de mi imaginación, por desgracia debo reconocer que no soy tan buena escritora, no como para haber inventado alguien como tú. Tu eres el. Y el ha cambiado. Ha sufrido, le han dañado. Incluso yo le he dañado. Y a la vez ha sido feliz, a explorado el mundo, ha abierto las alas y volado al fin. Por todo ello puedo afirmar sin duda alguna que has crecido. Has crecido mientras nos veáis crecer.
-Me gusta cuando hablas de él, o de mi.
-Aunque mayor, no consigo imaginarte menos narcisista y curiosamente eso es algo que solo tienes tu. No lo has heredado de él. No se como, en esta relacion unamuniana nuestra, te he dado tu propio carácter y tu propia identidad. Haciéndote al final no solo un reflejo suyo sino un personaje con sus propios sueños y sufrimientos. Y lo curioso es que no se si eso hace que te vea más como un personaje o que me recuerdes más lo vivo que está el.
-A veces no soy capaz de seguirte.
-Ves, otra cosa graciosa. Tu eres yo, eres yo desde el momento en que yo te he dado vida. Tu eres otra cara de mi moneda con la que me gusta discutir y a veces ni siquiera tu puedes entenderme.. Y si tu que eres yo no puedes seguir el ritmo de mis pensamientos, ¿no te hace eso mucho más el?
No se olvidalo, solo pensaba hablar un rato sola y al final he acabado hablando contigo o con el, no estoy segura.
Donde habita la magia.
viernes, 1 de diciembre de 2017
Senderos
Siempre he creído en el destino, en que las cosas estaban marcadas. También creo que nosotros podemos escoger un poco nuestro destino, pero a muy pequeña escala. Se que habrá mucha gente que no este de acuerdo conmigo, pero lo siento lo veo así, y cada día lo veo de manera mas clara.
Soy una persona de ideas claras, desde siempre, no recuerdo un momento de mi vida sin un plan, sin saber lo que quería o incluso como lo quería. Nunca me he permitido demasiadas distracciones, y cuando me alejo un poco del sendero que yo había marcado en mi mapa de la vida, me enfado conmigo como jamas lo he hecho con nadie. Sin duda se que soy en muchas ocasiones mi peor aliado.
Pero tras luchas, tras mover cada piedra que se presentaba en mi camino un día me di cuenta, que daba igual. No había cambiado nada, solo había caminado y caminado pero seguía sin haber hecho mas que dar vueltas alrededor de mi objetivo. Como si tan solo se tratase de una vieja ciudad amurallada y nadie quisiese abrir la puerta a este loco vagabundo. Sintiéndome tan perdida como cuando me olvido las llaves de mi casa y no se como voy a volver a entrar. Sabiendo solo, que tengo que entrar.
Y entonces recordé lo del destino, que estaba marcado, y no fue una alegría saber que yo no tenia la culpa, fue un completo hachazo darme cuenta de que no podía controlar la situación. No se si os lo he contado alguna vez pero desde niña odio aquello que no puedo controlar... Aun así trate de hacer lo que el universo me pedía, y aprender la lección, intente aceptar que tener un plan no significa que las cosas acaben saliendo como tu quieres, que trabajar y luchar por algo no siempre es un exito seguro. Acepte que debía disfrutar un poco mas de las cosas pequeñas, y no agobiarme tanto por las grandes. Y aun así el universo se emperro en enseñarme mas lecciones. Me enseño que a veces los amigos, están detrás de personas con las que jamas has hablado, a las que jamas has prestado un minuto de atención porque no podías soportar. Y en cambio son ellas las que mas cerca están de cambiarte la vida.
Supongo, que yo planifique el camino, que yo decidi el destino, pero lo que nunca pense es que seria el destino quien decidiera cuanto duraria el paseo, por donde debia ir, si habria montañas, rios, o pajaros que me despertasen con su canto, tambien fue el maldito destino quien dedicidio quien me acompañaria en este sendero. Y yo creyendo que esto si que lo podia controlar. Bendita inocencia... Pero aqui sigo señores, no me he rendido y un dia alguien me abrira la puerta del castillo, porque si algo tengo claro es que voy a convencer al destino de que debe ser asi.
martes, 28 de febrero de 2017
Steady as she goes II
Amigo mio, estas apunto de empezar una gran aventura una de esas que perdura en la memoria para ser contada a los nietos. Es sin duda uno de esos momentos que saldrán en la película de tu vida, un instante de los que te revuelve el estómago por el coctel de excitacion y miedo. Un día para el que te he visto prepararte desde que nuestros caminos chocaron. No hace falta que diga que lo harás bien, que estas completamente preparado para esto y para mucho más; pero aún así lo diré, porque se que vas a conquistarles como lo hiciste conmigo en su momento.
Como te iba diciendo te he visto prepararte para hoy desde que nuestros mundos se unieron, durante este tiempo en ocasiones has sido mi alumno y en otros mi mentor, pero no ha habido un solo instante en que dejases de ser mi amigo, un pilar que evitaba que este fragil personaje se derrumbase por completo. Por ese motivo no podía perderme esto aunque esta vez solo puedo (y debo, esta es tu aventura) ser un mero espectador. Pero aún así quería recordarte que estaré ahí escondida entre el tumulto deseando que todos tus sueños se hagan realidad.
En una ocasión una sabía persona me escribió en el reverso de una vieja carta en blanco y negro que disfrutase del momento, que viviera la experiencia. Asique aprovecharé este momento para parafrasearle y te diré que vivas, que disfrutes, que huyas de los planes. Que yo estaré esperando a que vuelvas sentada sobre la misma brizna de hierba dejando que la brisa juegue con mi pelo y el sol acaricie mi cara mientras espero a que regreses con las páginas de tu diario llenas de historias con las que podamos quedarnos una noche más en vela (o al menos, hasta que tu caigas en brazos de morfeo para no faltar a las tradiciones).
También te prometo que si en el camino nos volvemos a cruzar te saludare tres veces, mirando al horizonte con morriña y triste alegría (mientras la cámara se aleja y el sol se pone)
Y recuerda que vayas donde vayas siempre habrá un hueco para ti más allá de mis suspiros. Te quiero.